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25 dic 2014

LA CRIOLLA LÍNEA DE CARPENTIER (13)


En el estudio que venimos haciendo de la línea como vehículo imprescindible de la caricatura en el mundo a partir del siglo XIX, al arribar a la línea criolla topamos con ciertos criterios sobre tal definición. ¡Bendito tropiezo! Pues se trataba de la intervención inesperada de nuestro genial Alejo Carpentier viéndonos en el deber de sustituir la palabra criolla por radical, pero antes veamos lo que gráficamente a fines del siglo XIX, el español Landaluze popularizó como estampas criollas o costumbristas.
Y me explico: En otro trabajo del genial escritor cubano para la revista EL CORREO de la Unesco (enero de 1972) bajo el título de “Como el negro se volvió criollo” el autor aclara que:
”…La palabra criollo aparece por vez primera en un texto geográfico de Juan López de Velasco, publicado en México en 1571-74: Los españoles que pasan a aquellas partes (léase América) y están en ellas mucho tiempo, con la mutación del cielo y el temperamento de las regiones no dejan de recibir alguna diferencia en el color y la calidad de sus personas; pero los que nacen en ellas se llaman criollos. En 1608, en un poema escrito en Cuba, Silvestre de Balboa califica de criollo a un negro esclavo. Y en 1617 nos dice el inca Garcilaso de la Vega: Criollos llaman los españoles a los nacidos en el Nuevo Mundo, así sean de padres españoles o africanos…”
Estos párrafos explican el por qué nos vimos obligados a cambiarle el título. Pero, antes de continuar la serie, preferimos despedir el año con un sencillo homenaje a tan venerado representante de nuestra cultura con un apunte gráfico que le hiciéramos en vida y una síntesis biográfica a vuelo de pájaro:

En primer lugar ésta, su caricatura personal, no participó en ningún concurso de la especialidad, ni recibió comentario alguno de la crítica, pero que en mi interior es quizás, la que personalmente más me ha llenado pues, en poquísimas líneas faciales, lo pinté de cuerpo entero sin pigmento alguno, más bien hice un collage con el recorte de mezclilla color azul añil que tomé de mi ropero, tal y como lo recordaba al presentarse aquel día en los salones del Hotel Habana Libre para participar en un magno evento.
La otra semblanza pudiera calificarse de formalmente informal pues se trata de un hipotético viaje a la semilla con 110 años de duración hacia el 26 de diciembre de 1904, cuando el niño Alejito daba sus primeras muestras de vida en aquella vivienda de la calle Maloja en la Habana Vieja. Hijo de francés y rusa, cursó la primera enseñanza en Cuba, pero debido al viaje a Europa de sus padres tuvo que asistir al Liceo de Jeanson de Sailly en París, para cursar la secundaria, cuyo francés completó con las clases de música que su progenitora-–excelente pianista--le impartía en horario extracurricular.
Si agregamos que en 1921 matricula Arquitectura en la Universidad de La Habana y más tarde abandona planos y cartabones para dedicarse al periodismo en LA DISCUSION y EL HERALDO DE CUBA, o las revistas CHIC y SOCIAL, ya se vislumbran en él las inquietudes y dotes de la pasión de contar con solo 20 años, pues aparece en la nómina de la revista CARTELES desde su fundación en 1924, donde pronto ocupó el cargo de redactor jefe y tres años más tarde, fundador de la REVISTA DE AVANCE.
Junto a su vocación por la crítica musical, siguiéndole los pasos al maestro Fernando Ortiz, practica las ideas marxistas que lo llevan a la cárcel, donde surge la primera versión de su “Ecué-Yamba-O” y una vez libre, los argumentos para “La rebambaramba” y “El milagro de Anaquillé.
Aunque su nombre no aparezca en la Protesta de los 13, (1923) sí participa en el Movimiento Minorista junto a Mella, Pablo de la Torriente y Villena. En consecuencia “la porra machadista” lo obliga a salir del país con documentación falsa, gracias a la complicidad de su amigo francés Robert Denos, asistente en Cuba a un congreso periodístico. Tal vez estos hayan sido los motivos para la elaboración mucho después de su picaresca obra “El recurso del método” que vio la luz en 1974.
En Francia logra llevar a escena  “Ecue-Yamba-O” y colabora con Breton en la llamada Revolución Surrealista, además de establecer amistad con Louis Aragon, Sadoul, Picasso y Elouard, entre otros; mientras en España lo hace con García Lorca, Alberti, José Bergman y Pedro Salinas, durante los convulsos días de la Guerra Civil.
En 1939 regresa a Cuba junto a Marinello, Guillén y Félix Pita, asistentes al Segundo Congreso por la Defensa de la Cultura. Y de nuevo en la patria dirige por su orden la emisora CMZ, es nombrado Ministro de Educación y por último, Profesor de Musicología en la Universidad de La Habana.
Un hecho trascendental es su viaje a Haití en 1943 junto a su esposa, cuando visita Sans Souci y La Citadelle, entre otras experiencias inspiradoras de “El reino de este mundo”.
Un año más tarde logra ese maravilloso cuento “Viaje a la semilla” y a continuación “La música en Cuba”, obra que resume toda su investigación sobre el género en nuestro país, así como el descubrimiento de la obra de Estaban Salas en Santiago de Cuba.
En un nuevo periplo, por Nuestra América, se establece en Venezuela, casi simultáneamente organiza una radioemisora en Caracas, escribe crítica musical para El NACIONAL y lanza su libro “Los fugitivos” que resulta premiado. Pero lo más importante es su decisión en 1948 de emprender un viaje al Alto Orinoco en la Amazonía y dichas experiencias son las que inspiran esa obra cumbre de lo real maravilloso que es “El reino de este mundo”. La novela ve la luz al año siguiente en México y en 1951 logra visitar la capital azteca.
El triunfo de la Revolución Cubana lo sorprende en la cima de la fama, pero--espíritu incansable--su creatividad se multiplica en función de la superación del pueblo cubano con iniciativas, proyectos, y altas responsabilidades en el campo de la cultura y la educación. Pero eso no obstaculiza su obra personal con éxitos como “El recurso del método”  y “Concierto Bárroco” (1974), ”La Consagración de la Primavera” (1978) y por último un ejemplo de la más cruda sátira histórica “El arpa y la sombra” de 1979 donde el Gran Almirante de la Mar Océana queda bastante mal parado.
Desempeñó en esta etapa cargos en el exterior y recibe el Premio Internacional “Alfonso Reyes” de México, (1975); y ese mismo año el Premio Mundial “Cino de Duca” en Francia; por último obtiene el Premio “Miguel de Cervantes” España (1977).
Lamentablemente falleció el 24 de abril de 1980 en plena madurez, cuando desempeñaba el cargo de consejero cultural de la Embajada de Cuba en Francia.
Son sapenas breves pinceladas de su humilde admirador Blanquito, que quieren sumarse al tributo que todo el pueblo de Cuba, incluyendo a sus Cinco Héroes ya de regreso a la Patria, les reconoce al criollísimo Alejo Carpentier en este 26 de diciembre por su 110º. Aniversario ¡HONOR A QUIEN HONOR MERECE!

LA LÍNEA OLVIDADA (14)


Como explicáramos en el capítulo anterior sobre la línea según el concepto de criollismo expresado por Alejo Carpentier en la revista EL CORREO de la Unesco, reproducimos ahora este trabajo publicado en este mismo espacio--mayo del 2012-- bajo el título de “Viaje a la Semilla” (Segunda parte).
No era nuestra intención parodiar o que se interpretara como una irreverencia utilizar el título de una de las obras más representativas de lo “real maravilloso” en la narrativa de nuestro Alejo Carpentier. Todo lo contrario, lo que voy a contar también parece producto de la fantasía y sin embargo está basado en hechos concretos.
Aunque se trate de la historieta; esta historia real está protagonizada nada menos que por el afamado pintor, dibujante, y grabador costumbrista bilbaíno, Víctor Patricio de Landaluze. 
Independientemente de su posición crítica contra todo lo que contribuyera a nuestra cubanía, idiosincrasia, e independencia; fue un excelente artista y su obra-–ampliamente divulgada y reconocida en Cuba--supera por mucho su pésima actitud política.
Nos referiremos a las indagaciones que sobre el humorismo satírico en la prensa española hiciera el investigador sevillano Manuel Barrero sobre los orígenes de esta especialidad gráfica y la historieta en la prensa de aquella época, fenómeno este que surge entonces por primera vez en lengua española, pero paradójicamente, en Cuba, no en la península.

Según él “Fumetti a Cuba”, libro publicado en 1992 por Dario Mogno, Nessim Vaturi y Luigi F. Bona, en una coedición de Studio Metrópolis-La Borsa del Fumetto (Italia) y la Editoral Pablo de la Torriente (Cuba) bajo mi firma se había publicado “Il Fumetto della Stampa Cubana”, trabajo cuya copia facsimilar ofrecemos adjunta, donde se enumeraba una breve cronología de la especialidad en nuestro país y que comencé en estos términos:
 “…Durante la segunda mitad del siglo diecinueve se desarrolló un curioso género de protohistorieta en la prensa ilustrada de la época y las imágenes populares de los cromitos (postalitas) que venían en las (marquillas) envolturas de los cigarrillos. Más de 3932 publicadas así como en…..
186… EL MORO MUZA. Historieta autoconclusiva de Landaluce.
1862-1866. DON JUNÍPERO. Varias historietas de Landaluce.
1866-1874. Juan Palomo. Secuencia “El Tabaco” (6 viñetas de Landaluce)…”
Pido disculpas a nuestros vecinos por la deficiente traducción del italiano, pero de imperfecciones está lleno el mundo y en él vivimos. Tal vez más adelante podamos insistir en el desarrollo paralelo entre las publicaciones periódicas de la época y el de la litografía dirigida a la promoción de marquillas y cromitos de la industria cigarrera en Cuba, ambas fundamentales en el auge del género en nuestro país.
Otra observación de Manuel Barrero a dicho trabajo es que se nombre al autor como Víctor Patricio de Landaluce en vez de Landaluze, además, el artista firmaba a veces con el seudónimo de Bayaceto. (Agradezco pues la corrección en mi nombre y en el de mis vecinos).
De estos párrafos en cursiva y negritas viene la referencia apuntada por el maestro Barrero. Mi intervención un tanto dubitativa resulta intrascendente, pero da pie a reproducir sus opiniones, y sobre todo que, por su escrito se puede situar la fecha exacta en que esto ocurrió.
Mis pesquisas solo alcanzaron a rozar fechas y trabajos aproximados, debido a las condiciones de los ejemplares existentes en Cuba de la época, por el pobre estado de conservación, y colecciones incompletas, amén del limitado tiempo empleado para ello. Lo importante es lo que descubre el colega español.
En el segundo tercio del siglo XIX la prensa satírica en Cuba–-entonces colonia española—ofrecía signos evidentes de un nuevo lenguaje secuencial todavía en pañales, que más tarde sería reconocido como historieta en Cuba, comics en los Estados Unidos, fumettis en Italia, bande desinée en Francia y tebeos en la propia España.

En mis escasísimos tiempos libres como caricaturista-editorial en el diario, o en los semanarios ocupados fundamentalmente en pulsar la actualidad costumbrista, pude dedicarle algunas horas a desapolillar archivos, tanto en el Instituto de Literatura y Lingüística como en la Biblioteca Nacional “José Martí”, por tanto me resultó una sorpresa que el destacado investigador español me citara en el trabajo que bajo el título de “Arqueología” publicó en el Núm. 14 (Vol. 4), de junio del 2004, en la REVISTA LATINOAMERICANA DE ESTUDIOS SOBRE LA HISTORIETA, de la Editorial Pablo de la Torriente.
He aquí sus palabras: “…Blanco Ávila acertó a señalar que el origen de la historieta cubana habría que buscarlo en las obras que el firmante “Landaluce” destinó a las publicaciones EL MORO MUZA y DON JUNÍPERO, señalando como punto de partida la difusa fecha 186…” y sin dar indicaciones de por qué consideraba historietas aquellas obras (1992:7)…”
De esa información dada hace algún tiempo, sintetizo lo siguiente: En el Número 25 de LA CHARANGA (31-1-1858) --hace exactamente 156 años—aparecía un juego de imágenes litografiadas sin título, alusivas a la idiosincrasia de La Habana. En ese momento el autor de dicha investigación situó su verdadero origen dos meses después, cuando el propio semanario, en tres ediciones consecutivas No. 31 (14-3-1858) al No. 33 (28-3-1858), bajo el título de “Croquis marítimo” Landaluze no solo desarrolla las contradicciones entre las labores del cabotaje y los amores de una pareja, sino que lo hace en una tira de viñetas, y los personajes protagónicos se mantienen fijos e identificables aunque no se nombren. Otro aporte de la serie es precisamente su seguimiento en ediciones próximas.
Debemos aclarar que dos de las tres imágenes reproducidas en este trabajo corresponden al semanario DON JUNÍPERO, con dibujos del propio Landaluze pero  correspondientes a los números 30, 36 y 42 del año 1863-64, por tanto no son exactamente las primeras realizadas por él.
Sin embargo, la tira que ahora publicamos bajo el título de “Historia de las desgracias de un  hombre afortunado” corresponde al semanario LA CHARANGA pero en las ediciones 6, 7 y 8 de 1857, por tanto compiten no sólo en marcar el inicio del género en Cuba, sino también del famoso CONTINUARÁ tan recurrido en los comics, las telenovelas, el cine de suspense, y otros géneros recreativos.
Por lo tanto espero haberlos dejado satisfechos--o por lo menos motivados--con estos ejemplos de protohistorietas en nuestro país y de ser posible, me gustaría seguir sus huellas en Cuba, pero bajo el nuevo concepto de“Arte Secuencial” como lo bautizara tan acertadamente el maestro Will Eisner en su libro homónimo. Esperen las sorpresas de un nuevo capítulo de este recorrido por la línea para el nuevo año 2015. Mientras tanto…..mis vecinos les desean.
¡FELICIDADES!


LA LÍNEA RADICAL (12)

No quisiéramos terminar este año 2014 en deuda. Varios acontecimientos trascendentales ocurridos en diciembre no me permitieron continuar la saga que veníamos abordando sobre la importancia de la línea para el dibujo humorístico y la gráfica en general. De ahí que en esta última entrega del año incluyo los capítulos 12, 13 y 14, donde podrán apreciar aspectos estrechamente relacionados con los aportes cubanos a su desarrollo a partir de una típica colonia española: La última en Nuestra América.
Por el camino hemos tenido que cambiar el rumbo e ir a los orígenes que van mucho más allá de nuestro país.
Hasta ahora habíamos visto la evolución de la gráfica humorística europea a partir del desarrollo poligráfico y las revistas ilustradas en Francia, Alemania, Reino Unido y España, así como las distintas escuelas investigadas por el crítico cubano González Barros en su obra “La Caricatura Contemporánea”
Pero por entonces había que graficar historias más extensas donde también hiciera su presencia la parodia, la ironía, el fantasía, la sátira, el ingenio y otras manifestaciones que requerían varias viñetas en forma secuencial, lo que dio en llamarse historieta (en español) así como sus orígenes que-- según los propios españoles--partían de las antiguas aucas o aleluyas catalanas, tan populares para los niños de entonces. Una muestra de ello acabamos de adjuntar para ustedes.
Como necesidad del propio desarrollo en dichas publicaciones surgieron compendios sobre lo que se conoció como proto-historieta. Me permito copiar un párrafo de cierto ensayo titulado “Elogio y reivindicación del libro” publicado en enero de 1972 por nuestro Alejo Carpentier en la revista EL CORREO DE LA UNESCO y copio:
“…El genial humorista suizo Tópffer inaugura con suDoctor Festus” (1849) la tira cómica, tal como hoy las entendemos: Todos los especialistas en la materia lo proclaman iniciador y maestro en el género. En 1889-1893, el francés Christophe, con su clásica “Famille Fenouillard”, prosigue el camino de Tópffer, sin olvidar la serie de “Le Sapeur Camember” (1890-1896). Cuando yo era niño, antes de la Primera Guerra Mundial, existían en París, gozando de enormes tiradas unos periódicos infantiles titulados LE PETIT ILUSTRÉ, CRI-CRI, L´INTREPIDE, LA SEMAINE DE SUZZETE (creador del personaje clásico Bécassine) y L´EPATANT con las inolvidables aventuras de los Pieds Nickelés de Forton (1908) que con el tiempo entraron en el panteón de su propia gloria.(…)En los mismos años los niños se regocijaban con las aventuras y tribulaciones de “Buster Brown” y de su perro, que se remontan a 1902. Y hacia el año 1913, el genial Bud Fisher, en los Estados Unidos, inventaba los extraordinarios personajes Mutt and Jeff (en América Latina: Benitín y Eneas) que se mantuvieron durante más de cuarenta años en las páginas de los diarios, entroncando, a través de las amarguras del nuevo rico de Geo McManus o de los maravillosos “Katzenhammer Kids (en español: Maldades de dos pilluelos)…”

Y así continúa Carpentier enumerando muchos de los personajes de tiras cómicas de la primera mitad del siglo XX en los Estados Unidos. Recordemos que en trabajo anterior habíamos destacado la obra del alemán Wilhelm Busch y sus famosos “Hans und Moritz”, antecedentes de los pilluelos yanquis. Pero nos hemos detenido aquí porque la lista se corresponde con otro análisis hecho en la obra de González Barros sobre la caricatura, fechada en 1916. Veamos que dice este destacado investigador cubano sobre los comics-strip norteamericanos en su Capítulo Noveno titulado AMËRICA:
 “…En el Norte, los Estados Unidos crearon una escuela particular—derivación de algunos cánones ingleses y alemanes—que han llegado a constituir una tendencia. (…) Mientras los Estados Unidos forzaban la amplitud de los cánones germanos y falseaban los dogmas ingleses para instaurar elementos que rechazan el Arte en general. (…) En este sentido—en el de la innovación—los Estados Unidos se adelantaron. (…) Estos son los que han concebido la manera de colocar dentro del dibujo de una historieta las frases de todos los monólogos o de todos los diálogos sostenidos por los personajes ideados por una fantasía muy digna de ser mencionada. (…) Son de muy mal gusto esas aglomeraciones de palabras que siempre vemos escritas en cualquier lugar del dibujo y que parecen perseguir a cada tipo. No hay nada más falto de buen sentido artístico, ni que revele mayor pobreza de expresión gráfica. En el afán de realizar el hallazgo de la perfecta sensación, llegan hasta imitar con palabras los sonidos de los golpes…”
Como pueden apreciar, entre otros aspectos se trata de los ya tradicionales globos (en español) o fumettis (en italiano) y las no menos famosas onomatopeyas: Pero son muchos más los elementos críticos mantenidos por el investigador en esta obra-ensayo que motivaron mi inquietud; no por falta de sinceridad y criterio, sino de ausencia dialéctica cuando se concibió en los balbuceos del género (1916). Fallo también marcado para la incomprensión de otras manifestaciones del arte aplicado con las nuevas tecnologías de la estampación y la poligrafía que identificaron el siglo XX, llámese dibujo animado o publicidad.

De ahí la conversación con el maestro José Antonio Portuondo, que nos motivó al estudio y actualización de los conocimientos vertidos a principios del siglo XX por dicho crítico cubano González Barros; avalado más tarde por la opinión del maestro Juan David en su obra póstuma “La caricatura: Tiempos y hombres” del 2002; por los aportes del profesor Jorge R. Bermúdez con “Caricatura y crítica de arte” , además del profundo análisis que la Dra. Adelaida de Juan nos regalara en varias entregas sobre los tres personajes satíricos más autóctonos de la gráfica cubana como lo fueron el Liborio, el Bobo y el Loquito, cada uno en su contexto”.
En consecuencia ahora nos apoyaremos en el trabajo periodístico de Carpentier para la revista de la UNESCO en 1972 y los convido a realizar junto a él un nuevo  “Viaje a la Semilla” para detenernos de en el artículo “Elogio y reivindicación del libro” donde no sólo arremete contra ”…Las lamentaciones y anatemas lanzados por los miembros del Santo Oficio de una suerte de cultura contra los “muñequitos” --así los llamamos en muchos países de nuestra América llamada Latina-- (…) ¿La ciencia-ficción? Es un género literario que ha existido siempre. Sus clásicos son Luciano de Samosata; el autor de un romance medieval de Alejandro el Grande que hace descender al héroe de su historia a la cima de los mares en una cápsula de cristal. (…) Cyrano de Bergerac con su viaje a la Luna. (…) ¿El folletín periodístico, televisado? Folletines fueron los Libros de Caballería con Amadís de Gaula a la cabeza. (…) Hasta llegar a ese super-folletín--con magníficas calidades literarias--que fue el de “Los Miserables” de Víctor Hugo, primer best-seller absoluto de la literatura mundial…”
Por último y para reafirmar lo dicho, con hechos y no con palabras, acudo de nuevo a las ilustraciones de dicho artículo carpenteriano en EL CORREO y mostrar un ejemplo del arte precolombino que pudiera interpretarse como proto-historieta, y es nada menos que el Lienzo de Tlaxcala--arte radical y secuencial--sobre la conquista de México por los españoles y el fin del imperio azteca. Esos dibujos fueron realizados por los artistas indígenas del pueblo Tlaxcala, posiblemente alrededor de 1560, es decir, casi un siglo después de los sucesos que se describen en el mismo: En una de sus viñetas aparece Hernán Cortés y la Malinche, su amiga íntima, que le servía de acomodo e intérprete. ¿Son o no originales esos trazos heredados de la ancestral cultura americana?
Como hemos visto, al apoyarme en opiniones de Alejo Carpentier, trato de contextualizar las del minucioso análisis realizado por González Barros a comienzos del siglo XX, pero nos resulta incompleto pues debemos diferenciar entre lo que pudiera definirse en Cuba como la línea radical y la criolla.
Por tal motivo, la próxima entrega, la llamaremos “La línea criolla” de Carpentier: (13)”

17 dic 2014

¡ÚLTIMA HORA!


Hace exactamente 365 días publicamos para nuestros fieles vecinos en este mismo blog el trabajo titulado “Promesas y cumplimientos” en el tono jocoso conque siempre lo hacemos, partiendo de la vieja tradición de dejar la fuma o el trago cada fin de año.
En aquella ocasión del 2013 fue diferente: Con motivo del encuentro celebrado en Suráfrica para rendir homenaje a Nelson Mandela. trascendió la noticia del breve saludo que sostuvieron nuestro Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Raúl Castro Ruz y el de los Estados Unidos de América Barack Obama.
En ese momento se me ocurrió una caricatura, que por su inmediatez no envié a ningún órgano de prensa. He aquí la copia de lo publicado ese día.
Hoy 17 de diciembre del 2014, fecha festiva para los numerosos devotos de San Lázaro en Cuba, nos sorprendió otro milagro; la noticia del establecimiento de relaciones entre Cuba y los Estados Unidos, con el reconocimiento del fracaso de la criminal política de aislamiento por parte del gobierno yanqui, y sobre todo por el regreso de los tres héroes cubanos que aún se mantenían presos injustamente en cárceles de los Estados Unidos.
Junto al pueblo de Cuba y la solidaridad de todo el mundo, compartimos la desbordante alegría de los familiares de los cinco, en particular de Adriana, cuyo esposo Gerardo estaba condenado al absurdo de dos cadenas perpetuas más 15 años. Y precisamente en recuerdo al inolvidable H. Nordelo, dedico la caricatura de hoy, que podríamos titular “Cumplimiento de promesas” para el 2015.
 ¡FELIZ AÑO NUEVO!